3 de junio de 2009

Mi cuerpo es mío, mis células también

Entre los avances colectivistas que dejan estos seis años de kirchnerato está la declaración -por ley del Congreso- de que los cuerpos de los argentinos son de utilidad pública y sujetos a expropiación postmortem (con lo que en estos países esto implica). 
Hace un mes y medio el Incucai resolvió que las células madre preservadas también eran de uso público, lo que se comentó acá por Klaus y Raquel.
Hoy, en extraña buena noticia proveniente de la Justicia, un fallo de un tribunal federal rosarino ordenó la suspensión de la estatización de este tejido que es considerado -debería ser obvio- propiedad de sus originantes. 
Un aplauso de pie para la jueza Aramberri. 

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