26 de abril de 2013

Tucumán, la perla del Indec


En noviembre pasado volví an San Miguel de Tucumán, después de una pila de años. Me parecía que había dejado acá las impresiones del viaje, pero no las encuentro. Igual, se resume fácil: infraestructura urbana destartalada, autos viejos, taxis hechos pelota. Empanadas espectaculares. Mugre, baches, putas a montones caminando las veredas del Parque 9 de Julio. Policías desdentados, pibes changos mangueando. Calor sofocante. Y Alperovich por todos lados. En los carteles electorales medio despintados de la elección previa, en los carteles de las concesionarias de un par de marcas, en los carteles de obra pública. La postal de una ciudad tercermundista al palo. Para la estadística oficial, una ciudad que no tiene indigentes.

28 comentarios:

Max A Secas dijo...

O sea, La Havana con posters de Alperovich en vez de Fidel y el Che.

Andy dijo...

Baches en las calles del feudo, y Alfa Romeos comprados al Alperovich Group...snif.

Anónimo dijo...

santa cruz, tucumán, ejemplo de los que nuestros políticos pretenden que sea el país: un feudo controlado por una banda

carancho dijo...

Al carajo, no me dan pena. Disfruten lo votado, tucumanos muertos de hambre.

Nicolás dijo...

Me sumo a lo dicho por carancho. ¿Alguien me puede explicar por qué la "gente" de Tucumán permite que le hagan de todo?
Es el agua? La educación, la falta de educación?

Anónimo dijo...

No, son ladrones (choros) del primero al último. Es como en todos lados: hay un 5% o menos al que le importa esto, el resto aplaude al "gato" de turno y hacen cola para tratar de rapiñar algo.

Anónimo dijo...

La enfermedad de base es el resentimiento. Si la fortuna personal se da por meritocracia, entonces el que la ambiciona y no la tiene se siente culpable. Si el afortunado es sólo uno y porque roba, entonces no es una cuestión de responsabilidad sino de suerte. A mí me parece que la gente se ofende más porque fariña ostentó con la ferrari ("disfrutó" la guita), que por la corrupción en sí. Nápoles sin Milán. Hasta que no dejemos de ser resentidos... esto no funciona.

Anónimo dijo...

Entonces, Sr./Sra. de la 1:17 pm, dificulto que ésto funcione, porque el resentimiento es parte del gen argentino.
Generaciones y generaciones de mirarse en el 'espejito, espejito' y cuando la imagen que vuelve no es la deseada instilar odio y rencor en la descendencia han hecho el antimilagro, una sociedad que en lugar de renacer de sus cenizas decide revolver en los rescoldos de la desvergüenza y voluntariamente seguir hundiéndose para seguir cayendo, en un vacío sin fin.

Anónimo dijo...

Soy Sr :)
A mí lo que me da la pauta del tema del resentidismo es que gran parte de la clase media, la más afectada por el estatismo, restricción de libertades e impuestos vota como alternativa... al FAP! Un gran cáncer de la Argentina es que la UBA y otras universidades estén formando a los líderes del futuro en el comunismo de 1930. Sólo en Latinoamérica. Si no eran ya resentidos, se les inocula el virus y c***amos: no se va más.

Anónimo dijo...

http://threesixfivetheproject.squarespace.com/blog/2013/4/26/260413

Del blog del hermano de la periodista griega que recibió el pedido de pista ministerial.

En Alfa Centauri todavía no saben del papelonazo, pero ya se van a enterar. También.

Anónimo dijo...

mas de lo mismo en este pais
raul wahnon

Julio Rougès dijo...

Carancho y Nicolás: váyanse ustedes al carajo con lo de "no me dan pena...tucumanos muertos de hambre".

Con la misma frivolidad un extranjero podría decir lo mismo de todos los argentinos.

Es una falta de respeto a los muchos tucumanos antiK (como yo), y a los pobres que por error o por dependencia creada por el kirchnerismo, el alperovichismo y e general el populismo, consideran que no hay alternativas.

Ni siquiera me interesa si comparten o no mis puntos de vista en lo político o económico. Pero respeten a los tucumanos, inclusive a los que se equivocan.

Y si piensan otra cosa, váyanse al carajo.

Wilson dijo...

Bueh, apareció la barra brava de Sportivo Desnutrición...

Julio Rougès dijo...

Muy ingenioso, Wilson. Muy canchero. Muy sobrador.

Los comentarios que critiqué revelan un gran nivel intelectual y moral, al culpar a las víctimas por sus desgracias. En esa tosca concepción, "los tucumanos" -colectivo que incluye a todos los que viven en Tucumán, sin distinción de qué hacen, qué opinan, a quién combaten y por quién votan, sin diferenciar a las víctimas de los victimarios- se merecen eso. Como los venezolanos merecían a Chávez y hoy a Maduro, los argentinos a Kirchner y a su continuadora.

Dentro del genérico concepto "argentinos" estamos todos; ergo, también Carancho, Wilson y compañía se merecen las calamidades nacionales de igual manera que los tucumanos merecemos nuestras desgracias.

La desnutrición es una calamidad que merece al menos conmiseración y empatía con los que la sufren, no aires estultos de pretendida superioridad. Además, ¿es sólo un problema tucumano? ¿no existe en la Villa 31, en Fuerte Apache o en las villas miserias de Rosario?

De todos modos, no quiero comparar desgracias con desgracias, miseria con miseria, desnutrición con criminalidad, un tucumano que manguea con un porteño que balea a una embarazada. Simplemente, rechazo el primitivo concepto de una culpa colectiva o de un lodo común que cubre a todos los que habitan en un determinado territorio.

Mariano Iraola dijo...

Adhiero a lo expuesto por Julio.
Lamentablemente, indigentes hay en todos lados. Yo vivo en una zona de Buenos Aires de, si se lo quiere decir así, clase media alta/alta, y la indigencia en la calle se nota constantemente.
Basta ver a la gente que duerme en la calle.
Además de que no se puede culpar al indigente por su estado de indigencia, estoy seguro que muchos de ellos ni siquiera votan.
Saludos.

Sine Metu dijo...

"Si prefieres el bienestar a la libertad, la tranquilidad de la servidumbre al animado desafío de ser libre,
vete en paz a tu casa. No te pedimos tu consejo ni tu apoyo. Inclínate y lame la mano que te alimenta.
Que tus cadenas sean livianas, y que la posteridad olvide que fuiste nuestro compatriota." Samuel Adams

Massa dijo...

Es hora de que los tucumanos, y los argentinos, dejemos de sentirnos víctimas y tomemos las riendas de nuestro destino.

Yo no me sentía bien en Argentina. En el 2002 me fui. Volvi en el 2004 por un tema personal (familiar). Y en el 2009 me volvi a ir. Por lo menos "I put my money where my mouth was".

Y Julio, no sé si te das cuenta, pero opinar que los pobres, por error o dependencia, votan equivocadamente, es ser peyorativo con ellos. Yo no coincido: votaron por Alperovich? Que se jodan.

BlogBis dijo...

En realidad es así, los argentinos nos merecemos lo que nos pasa como país.
Los votantes del "modelo" por ponerle su apoyo en la urna.
Los no votantes, por no haber hechonada eficaz para pararlos.
Y digo eficaz, porque hay muchísima gente que hace pero hace cosas inútiles e ineficaces y piensa que eso es oposición o hasta resistencia.

Julio Rougès dijo...

Me harté de la mayor parte de los comentarios.

Sine Metu, ¿a quién o quiénes te refieres con tu archiconocida cita de Samuel Adams?
Tampoco me interesan tu consejo, ni tu apoyo. Sigan los rosarinos votando por Binner, o por quien se les dé la gana, y pensando que son distintos. O no voten, y encabecen una secesión.

Massa: no critico tu decisión de irte del país, pero no alcanzo a comprender cuánta relevancia tuvo en el destino argentino, y cuál es la culpa de quedarse.

Y considerar que los pobres en general no están en condiciones de conocer ni de apreciar las virtudes de las escuela austríaca o de Ayn Rand no es subvalorarlos, sino conocerlos y respetarlos más allá de sus errores (por supuesto, no todos votan por el kakismo).

BlogBis: ni yo, ni muchos de los argentinos, nos merecemos lo que nos ocurre. ¿Es culpa de un enfermo de cáncer, que los tratamientos intentados no hayan sido hasta ahora eficaces?

Blas dijo...

Julio, si un pais geograficamente rico que no tuvo guerras ni catastrofes naturales hace setenta años que se empobrece año tras año creo que la responsabilidad hay que buscarla en su gente. La responsabilidad dependerá de la capacidad de entender y actuar de cada uno de los habitantes,por eso las clases dirigentes de este pais no tenemos perdón. Pero creo que el sayo le cabe en parte a todos.

BlogBis dijo...

Julio ojo que yo me incluyo entre los culpables. No digo, los culpables son los argentinos, digo somos los argentinos.
Milité en dos partidos "liberales". Que logramos, nada. Uno hizo más corruptos que diputados. El otro directamente fue una risa.
La culpa es de los que no nos votaron? No, es nuestra de no haber sabido hacer una propuesta potable para la mayoría.
Si te sentís ofendido, si pensás que no sos culpable, que sos víctima de un mal que hicieron otros, entonces lo siento mucho pero hartate tanquilo de nuestros comentarios y quedate en la autocompasión.
Este blog no tuvo nunca como proyecto juntar adulones complacientes.

Leandro dijo...

Tucuman es uno de los ejemplos mas salientes de la Argentina feudal, el condado otorgado por la corona de Peronia a la familia local de turno. Exponente mas elevado de esa mentalidad, junto con, quizá, Chaco, Formosa y Catamarca.

Nadie pide que estén todos los que están en contra del régimen apostados en sus balcones con sus fusiles prestos a defender la libertad...
Pero el hecho de que no sean los cuatro centros neurálgicos de un movimiento antipopulista, de desobediencia tributaria, por ejemplo, llama la atención.

Si resulta que el 50% de la población es empleada estatal y otro 25% vive de las ayudas-dádivas-subsidios... el otro 25% acepta manso? Bloguea pidiendo respeto y "que no los metan en la misma bolsa"? Declama que "no se merece lo que le pasa" mientras le reza a lo-que-le-corresponda que cambie su presente?

En ese marco, se puede decir que, lo que les pase, bien ganado se lo tienen. No tendría que quedar ni una actividad económica en pie, cada capitalista ya tendría que estar hace tiempo en lugares mas benéficos.

Fábricas cerradas, dueños eligiendo provincias (o países) mas aceptables para invertir. Pero no, reclaman que el Estado les banque parte de los sueldos de los suspendidos, que les frene a los sindicatos, que les de alguna promoción industrial. Se ponen solitos en lugar de diente del engranaje.

Olegario dijo...

Leandro, al 50% de empleados estatales y al 25% de cobraplanes, no los mantiene el 25% restante.

Gracias al sistema de coparticipación federal que tenemos, todo el país es el que contribuye a mantener a estos feudos pedorros. Si ese 25% "rescatable" se va a otra provincia sigue siendo contribuyente del sistema.

Para liberarse de esa carga se tendrían que ir del país.

Igual que todos nosotros.

Max A Secas dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Julio Rougès dijo...

¿Quién se queda en la autocompasión, club de aplaudidores recíprocos?
Si no quisiste moderar los comentarios que dieron inicio a mi bronca (Carancho y Nicolás) significa que los compartís ("se lo merecen, tucumanos muertos de hambre"),o no te importa.
Lo mío no es autocompasión, sino furia bien tucumana. Y si no querés adulones complacientes, comenzá por los comentaristas habituales.
No tengo por qué explicar cuáles son mis diferencias y mis actitudes públicas, ni sumarme al séquito de corifeos de Blogbis. A esta altura, lo que lamento es compartir alguna idea con Uds., pese a ustedes. A un muchacho joven lo convertirían en comunista.
Ya consiguieron que se alejaran Raquel, Carlos y algunos más. Sigan así, Blogbis, Sine Metu, Max a Secas, Carancho, Nicolás, Leandro y compañía.
Hago lo expresa salvedad de que excluyo a Mariano Iraola,único que no se sumó a vuestro desafinado coro.






Leandro dijo...

Julio, te contesto porque me referenciaste en el último comentario.

Al principio criticaste (y yo creo que con razón) el uso de términos como "muerto de hambre" o el hecho de hablar de culpas colectivas. Hasta ahí, coincidí con vos en un 100%.

Pero a partir de tu segundo comentario (y con virulencia montante) estás desestimando las opiniones de cualquier otro por no coincidir con las tuyas. Criticás a los demás en los exactos mismos términos que rechazás (te cito: "Sigan los rosarinos votando por Binner, o por quien se les dé la gana, y pensando que son distintos. O no voten, y encabecen una secesión.").

Por lo demás, intenté escribir (creo que así se entiende) que me llama la atención que la porción de la población tucumana que da sentido a la actividad económica de la Provincia no haya tomado absolutamente ninguna medida efectiva (cada uno a nivel individual) para torcer el rumbo de la Provincia en particular, en 10 años de kakismo.

Es mas, si me apurás, si vemos la sucesión Palito (populista de origen mediático), Bussi (corporativista), Miranda (populista de origen gremial) y Alperovich, llevan al menos veinte años votando opciones anti-derechos individuales, anti-desarrollo económico, anti-mercado.

Lo mismo veo en otros exponentes extremos del feudalismo provincial ("autoritarismo sub-nacional" quizá no es tan ofensivo?) en, ejemplos, Formosa-Chaco-Catamarca-La Rioja.

Llegado al punto, sí entiendo autocompasión en, por ejemplo, tu frase sobre el enfermo de cáncer (experiencia personal: hay ahí un determinante genético, que no existe en el hecho de cómo vota una persona. E incluso así, la persona sí tiene por la enfermedad responsabilidad si es un cáncer que se ha desarrollado a partir de incorporar factores de riesgo, llámese un fumador; nunca la puede tener por la inefectividad del tratamiento, pero si por el hecho de que sea necesario). Equiparar la desgracia político-económica que te sucede con una enfermedad "relativamente" aleatoria es liberarse de culpa.

Si no querés, no tenés ganas o no podés ver que, en buena medida, la actualidad tucumana es resultado de como mínimo veinte años de decisiones democráticas del pueblo tucumano del que formás parte, de acción u omisión de sus elites (de las que formás parte y a las que formás desde tu labor), de reproducción de perversos esquemas y de mansa aceptación por parte de cada persona de estas estructuras de opresión populistas, quizá seas mas obstinado en el error de lo que vos creés, o quizá sepas algo que yo no se.

Por mi parte, lo dicho lo sostengo: al enojarte por el cartel de "muertos de hambre" y por el "coro de repetidores" que te cuelgan la parte de culpa que entienden te corresponde, pusiste un tema en el que tenías razón con otro en el que al menos para mi no la tenés, tomando la legitimidad del primer reclamo no la pudiste trasladar al segundo.

Una última observación: el corifeo es el director del coro, o en su segunda acepción, su integrante sobresaliente. Por ende, es imposible hablar de un "séquito" de los mismos. Nunca está de más revisar qué quieren decir las palabras que utilizamos para no quedar como burros. Te regalo ese consejo para que lo hagas extensivo a los representantes democráticos que las sociedades de la que formás parte vota.

Un saludo.

Julio Rougès dijo...

Leandro: respondo a tu comentario porque, dentro de todo, sigue las reglas del debate y al menos reconoces la razón que me asistía, a tu entender, al principio, y coincidías conmigo en un 100% (lástima que esa coincidencia inicial no se haya hecho pública también liminarmente).
Los comentarios en general también fueron inequívocamente agresivos, razón por la que no puede reprochárseme la “virulencia montante” de mis respuestas. A las cons-tancias del blog me remito, reproduciendo algunas de ellas: Carancho: “Al carajo, no me dan pena. Disfruten lo votado, tucumanos muertos de hambre”. Nicolás: “Me sumo a lo dicho por carancho. ¿Alguien me puede explicar por qué la "gente" de Tucumán permite que le hagan de todo?
Es el agua? La educación, la falta de educación?”. Anónimo: “No, son ladrones (cho-ros) del primero al último. Es como en todos lados: hay un 5% o menos al que le im-porta esto, el resto aplaude al "gato" de turno y hacen cola para tratar de rapiñar algo”. Wilson: “Bueh, apareció la barra brava de Sportivo Desnutrición...”. Sine Metu: "Si pre-fieres el bienestar a la libertad, la tranquilidad de la servidumbre al animado desafío de ser libre, vete en paz a tu casa. No te pedimos tu consejo ni tu apoyo. Inclínate y lame la mano que te alimenta. Que tus cadenas sean livianas, y que la posteridad olvide que fuiste nuestro compatriota." Blogbis: “Si te sentís ofendido, si pensás que no sos culpable, que sos víctima de un mal que hicieron otros, entonces lo siento mucho pero hartate tanquilo de nuestros comentarios y quedate en la autocompasión.”
¿Es culpa de todos los tucumanos, y de todos los argentinos, que a través del fraude electoral implícito en la empleomanía, los planes sociales y las obras públicas pagadas por la Nación ayudado todo por el control casi total de los medios de comunicación, y el dominio ideológico en la universidad, hayamos pasado del populismo casi al socia-lismo? Friederik von Hayek era más prudente cuando escribió “El camino hacia la ser-vidumbre”. No se puede poner en la misma bolsa a todos, reprochando a los que votan a favor, y a los que votan en contra; a los que asisten y a los que no asisten a las mo-vilizaciones; a los que trabajan y a los que no trabajan; a los que escriben su blog dando el nombre y apellido y a los anónimos.
Y ya que quieres hacerme señalamientos estilísticos o conceptuales, te respondo que tienes razón en cuanto a lo de corifeo; empleé la palabra en su acepción vulgar. Y añado, para que nadie quede como burro: cuando la palabra “más” se utiliza como adverbio comparativo (http://www.rae.es/dpd/srv/search?id=Cbumyr3WLD6Afn24Wr), no la conjunción adversativa equivalente a “pero”, lleva tilde. Mí (cuando lo empleas como pronombre, no como adjetivo), también debe tildarse.
Saludos

Anónimo dijo...

Siguiendo con el tema, acá en Tucumakstán no se pudo ver el programa de Nelson Castro en el que aparecerían los "enemigos" del zar Alperovich. Entre ellos había personajes de una catadura moral más que sospechosa y , eventualmente viudas de José, como Cisneros y sus nenes de la Bancaria que aprovecharon la bolada con el despido de una odontóloga con cáncer para seguirle tirando por elevación a José Jorge I. La sra fue despedida del PAMI para nombrar en su reemplazo a la hija del gobernador. El único que podría salvarse es el sr Lebbos a quien le mataron su hija en circunstancias muy similares a las de Marita Verón, aunque en ese momento tambien era funcionario del gobierno.
Por lo que ven casi todo el tucumanaje lumpen está peleando por el poder de una u otra forma. Y la gran mayoría termina convalidando a unos o a otros en las urnas. Nosotros, aunque a J. Rouges no le guste, somos artífices de nuestras propias penurias. Es doloroso pero desgraciadamente cierto.